La obra de los profetas del desastre
Por Wilfredo Moreno
En la Edad Media eran muy comunes las escenas en que aparecían profetas del desastre llamando al arrepentimiento y a la sumisión total a la Santa Iglesia Católica. Era deducible que detrás de todas esas campañas estaba comprometida la cúpula del Vaticano, la estrategia no era otra que tener al pueblo asustado para mantenerlo sometido a la antigua Iglesia.
En la Colombia del siglo XXI aparecen escenas similares: profetas del desastre que aseguran que la economía entró en resección, que las metas que el gobierno se propuso no se cumplirán, enseñan cifras que muestran que todo se detuvo desde la construcción hasta el comercio se apoyan en encuestas hechas a empresarios y consumidores que muestran desánimo y pocas ganas de invertir o comprar.
Como antiguamente, estos profetas forman parte de una estrategia que le está haciendo mucho daño al país. Lo peor que le puede pasar a un enfermo en recuperación es que lo desanimen para que recaiga. Hay que recordar que la economía colombiana está enferma y aunque como paciente ha mostrado altos síntomas de mejoría, aún está delicada por tal motivo los constantes llamados a la desestabilización están creando los efectos perversos que esperan sus patrocinadores.
La consecuencia mas evidente es que el PIB a duras penas ha podido llegar a las metas planteadas por el gobierno; un 4 % anual, cuando la idea es poner una meta fácil de cumplir para sobrepasarla. El daño es grave: le están quitando de medio a un punto de crecimiento extra, el cual, año tras año y complementándolo con otras medidas podría aumentar notoriamente.
Los constantes llamados a la desconfianza que hacen los profetas del desastre evitan que la inversión pase del 16 % anual. Menos mal que el gobierno entendió lo que estaba ocurriendo y el ministro Carrasquilla se pronunció en contra de las advertencias de peligro que los enemigos del progreso de Colombia estaban poniendo en cada vía visible. Ojalá se hubieran dado cuenta dos años atrás y hoy la meta de crecimiento conservadora del gobierno del 4 % anual estaría en por lo menos en un 5,3 % pero se debe entender que este gobierno tiene tantas preocupaciones por el mal estado en que recibió el país que los ataques mal intencionados muchas veces no se perciben y por eso crecen como lo hacen los tumores malignos: cuando se descubren, ya han hecho mucho daño.
En la Edad Media eran muy comunes las escenas en que aparecían profetas del desastre llamando al arrepentimiento y a la sumisión total a la Santa Iglesia Católica. Era deducible que detrás de todas esas campañas estaba comprometida la cúpula del Vaticano, la estrategia no era otra que tener al pueblo asustado para mantenerlo sometido a la antigua Iglesia.
En la Colombia del siglo XXI aparecen escenas similares: profetas del desastre que aseguran que la economía entró en resección, que las metas que el gobierno se propuso no se cumplirán, enseñan cifras que muestran que todo se detuvo desde la construcción hasta el comercio se apoyan en encuestas hechas a empresarios y consumidores que muestran desánimo y pocas ganas de invertir o comprar.
Como antiguamente, estos profetas forman parte de una estrategia que le está haciendo mucho daño al país. Lo peor que le puede pasar a un enfermo en recuperación es que lo desanimen para que recaiga. Hay que recordar que la economía colombiana está enferma y aunque como paciente ha mostrado altos síntomas de mejoría, aún está delicada por tal motivo los constantes llamados a la desestabilización están creando los efectos perversos que esperan sus patrocinadores.
La consecuencia mas evidente es que el PIB a duras penas ha podido llegar a las metas planteadas por el gobierno; un 4 % anual, cuando la idea es poner una meta fácil de cumplir para sobrepasarla. El daño es grave: le están quitando de medio a un punto de crecimiento extra, el cual, año tras año y complementándolo con otras medidas podría aumentar notoriamente.
Los constantes llamados a la desconfianza que hacen los profetas del desastre evitan que la inversión pase del 16 % anual. Menos mal que el gobierno entendió lo que estaba ocurriendo y el ministro Carrasquilla se pronunció en contra de las advertencias de peligro que los enemigos del progreso de Colombia estaban poniendo en cada vía visible. Ojalá se hubieran dado cuenta dos años atrás y hoy la meta de crecimiento conservadora del gobierno del 4 % anual estaría en por lo menos en un 5,3 % pero se debe entender que este gobierno tiene tantas preocupaciones por el mal estado en que recibió el país que los ataques mal intencionados muchas veces no se perciben y por eso crecen como lo hacen los tumores malignos: cuando se descubren, ya han hecho mucho daño.
posted by Ruiz_Senior at
4:01 p.m.
3 Comments:
Hoy es titular en eltiempo.com que han aumentado las ventas de bienes suntuosos y han bajado las de comida y medicamentos. No tengo los elementos de juicio precisos para asegurar que eso, si es que se da, tiene una explicación distinta a que la situación de los más pobres haya empeorado en el último año, pero sí encuentro muy extraña la asociación. Muy típica de esa propaganda.
Una explicación posible de que se hayan reducido las ventas de alimentos es la emigración. Puede haber influido. Otro motivo puede ser la inflación: si los precios se mantienen estables en todos los terrenos, es posible que algunos productos bajen su precio, al menos en ciertos mercados.
Lo que no funciona por ninguna parte es que aumenta el gasto público y crece el empleo, al tiempo que la economía crece al doble de la tasa de crecimiento de la población, y sin embargo aumenta la miseria. Eso forma parte de la superstición de que el gobernante "bueno" llega y emite un decreto "justo" que perjudica a los ricos y favorece a los pobres.
A los lectores de El Tiempo, colombianitos al uso, al tiempo que se les da eso se les dejan caer migajas del presupuesto estatal por no producir nada. No es que los engañen, sino que esas mentiras complementan la clientelización de la parte parasitaria de la sociedad.
Así que parecen seguir tu idea, amigo Wilfredo: tú envías tu mensaje y al día siguiente el periódico publica una noticia demagógica y catastrofista de ese estilo. (Por cierto, es verdad que el mensaje lo publiqué yo por motivos de edición, pero no es obra mía.)
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Ruiz_Senior, at 11:35 a.m.
Javier
Lo que uno puede decir, es que las encuestas son muy fáciles de manipular por que aunque se revela lo que se pregunta nunca se dice como se formula la pregunta, algo parecido pasa con los “estudios” Cuando la economía de un País cae en desgracia lo mas posible es que esos estudios demagógicos pongan la carne de res pollo y cerdo como “productos suntuosos” igual que el jamón especial el queso parmesano el vino el caviar. Los huevos de gallina, el arroz y las papas pasan a convertirse en productos reales de la canasta familiar, por eso cuando mejora la economía muchas Familias de clase media que habían caído en desgracia y vuelven a retomar su dieta entonces para esos “estudios” pasan a formar parte de la oligarquía.
Como Usted lo dijo, la Emigración fue gigantesca después de debacle económico gracias al gran gasto publico que comenzó en el Gobierno Gaviria y que lo acelero el de Samper gracias a las interpretaciones de la Constitución del 91 y ese es otro motivo.
Claro que detrás de toda esa propaganda existe un fin Ideológico-Político: asegurar que el crecimiento económico solo le sirve a los ricos y por eso es necesario un hombre con sentido Social que meta su mano bondadosa para que los pobres sean quienes mas se benefician, que no es mas que aumentar el gasto publico para que la clientela parasitaria se beneficie. Nadie puede negar que los programas “Sociales” de Garzón en Bogota están llenos de clientela parasitaria que gana por parte y parte y no solo los en los programas inventados por ellos, Instituciones que ya existían y funcionaban bien cayeron en la corruptela mas profunda como es el caso de Metro vivienda.
El problema no solo es Político, es decir, poner hombres de ellos en cargos públicos importantes, el sentido ideológico el que mas pesa y en Colombia esa ideología tiene tanto poder y dinero que obligaron al Polo Democrático a firmar una ley de garantías Electorales que le quita fuerza a la idea de no ir las urnas, o sea, la única válvula de escape que les quedaba, por que el apoyo económico de esa gente hubiera sido tan fuerte como evidente que “La izquierda” hubiera quedado al descubierto, mostrando que la gente mas rica poderosa y retrograda del País es la que esta detrás de ese “Proyecto con sentido social” .
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Anónimo, at 8:43 a.m.
Javier: Un poco retorcido el argumento de los recursos electorales, porque si fuera por eso el PDI tendría un interés natural en tener esos recursos, aunque sea para repartírselos entre ellos. Y los poderosos de los medios no tienen tantas ganas de gastarse la plata en financiar a sus pupilos políticos. A todos les conviene esa ley de garantías y recursos, tal vez menos a los liberales que necesitan mucho más para cebar la maquinaria.
Lo demás es la combinación de la hipocresía con el cinismo, del interés de los Santos y compañía en mantener el discurso tradicional que cohesiona a sus leales y de esos sectores de encontrar una identidad en la cual reconocerse, en la cual disfrazar el clasismo y el parasitismo y las rentas ociosas tras la rebeldía y la fraternidad que no pasan por trabajar. Se complementan porque son lo mismo, son un mundo de otra época que se inventa el autismo para sobrevivir en un mundo cada vez más hostil. No hay diferencias entre Santofimio y Camilo Torres, los camilistas se vuelven santofimistas cuando alcanzan los cargos de poder y los hijos son de nuevo camilistas hasta que "maduran".
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Ruiz_Senior, at 3:32 p.m.
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